El Grupo SOFICO se creó en 1962 cuando, con un capital de 15 millones de pesetas, se constituía en Madrid la Sociedad Financiera Internacional (Sofico), cuyo objetivo principal era construir, vender y arrendar apartamentos en la Costa del Sol, sobre todo en Estepona. Dicha sociedad era fruto del impulso de Eugenio Peydró Salmerón, un emprendedor almeriense.
Más tarde creará Sofico Inversiones para captar dinero de inversores por el que pagaba intereses de un 10% y que era invertido sobre apartamentos ya construidos y que se ponían a nombre del comprador, pero que eran alquilados y administrados por Sofico.
En octubre de 1973, el Ministerio de Hacienda dio orden de limitar la publicidad financiera con promesas de rentabilidad, que debería someterse a la aprobación administrativa. Sofico no volvió a prometer el 12 %, aunque salvó la imagen en base a que se cumplía la docena de años de actividad y, al año siguiente, la Agrupación Nacional de Agencias de Viajes distinguió a Sofico -junto con Iberia, Ota, Swissair y Renfe- con un diploma por la labor realizada en beneficio de “la industria turística”.
No obstante, en 1974 comienzan las dificultades para la sociedad. Sus directivos insisten, a través de los medios de información, en la salud de la empresa.
Pero a partir de julio, Sofico deja de pagar la rentabilidad comprometida con sus cuentapartícipes. Peydró ordenó diversas medidas para que los compradores y rentistas no se alarmaran, y Sofico siguió vendiendo apartamentos sabiendo que no los podría entregar nunca.
El 28 de noviembre de ese año, un acreedor solicita la quiebra de la sociedad. El 30 del mismo mes Sofico Renta presenta suspensión de pagos en el juzgado. Días antes, la revista Doblón titulaba en su primera plana «Sofico, desahuciado». Los días 5, 9 y 11 de diciembre presentaban la solicitud de suspensión de pagos Sofico Inversiones, Sofico Servicios Turísticos y Sofico Vacaciones
Yo trabaje en esa empresa, tenia 15 años y fue mi primer trabajo y mi primera decepcion en el dificil mundo laboral, en el que unos pocos priviligiados viven muy bien a costa de una mayoria explotada, que se limita a sobrevivir con un sueldo precario, la mayor parte de las veces
ResponderEliminarYo trabaje en esa empresa,en la cual parecia ir todo muy bien, cuando en realidad era todo una farsa, al final lo de siempre, unos pocos que se hincharon de ganar dinero a costa de los pobres acreedores de turno y de la explotacion a sus empleados, !!!vil capitalismo!!!!
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